Editorial Octubre 2012 - Concibiendo un cosechador robótico de manzanas

Oct
1
2012

 
La manzana es la tercera fruta más consumida a nivel mundial, exportando Chile alrededor del 10% de las 6200 ton que se comercializan anualmente en el planeta. Esta producción podría incrementarse  gracias a un mayor aprovechamiento de las bondades sanitarias, climáticas y edáficas de nuestro país. Sin embargo, debido al déficit de mano de obra en la etapa de cosecha, se registra una sensible sub-explotación de la manzana, generando notables costos de oportunidad en toda la cadena productiva.
 
Se han intentado diversas soluciones en el mundo para cubrir la ausencia de mano de obra en los campos, tales como la contratación de campesinos de países vecinos, el uso de monos entrenados y la mecanización de algunos procesos. Ninguno de ellos ha dado resultados satisfactorios, debiendo los agricultores chilenos enfrentar en las temporadas de cosecha una mano de obra cada vez más escasa y por consiguiente más cara. Puesto que el ítem de mano de obra representa más de la mitad del costo total de producción, el proceso se encarece y el negocio de las manzanas  va perdiendo competitividad. Ante ello se propone la incorporación al sistema productivo de algún artefacto automatizado que supla la mano de obra escasa en la etapa de cosecha de la manzana con cualidades diferentes a los ensayados en el mundo.   Este artefacto debe tener la capacidad sensorial para identificar la manzana en el árbol y la capacidad efectora para desprenderla y depositarla en recipientes colectores; ambas operaciones realizadas con una rapidez satisfactoria en una plantación espacio-temporalmente diversa. Es decir, este artefacto debe tener un nivel de inteligencia artificial para interactuar ante un entorno cambiante, adquiriendo por tanto idealmente la definición de robot.
 
Las simulaciones preliminares indican que un autómata inspirado en la anatomía y fisiología animal; es decir en un artefacto biónico, logrará que sus procesos sensoriales, efectores y procesuales lo conviertan en un factor productivo más atractivo respecto de otros. Es decir, la rentabilidad neta aportada por el robot  debe ser superior a otras soluciones alternativas.
Puesto que dicho autómata actualmente no existe, aun cuando los componentes tecnológicos supuestamente están disponibles para integrarlos y lograr el robot; el Posibilismo está perfilando una solución que sea tecnológica, legal y ambientalmente factible con un atractivo comercial para medianos y grandes agricultores chilenos.
 
Dr. Lucio Cañete Arratia
Editor en Jefe