Frecuentemente el productor agrícola no dispone de un registro completo y temprano del comportamiento de las diferentes variables que inciden en la valoración que el cliente le da al producto hasta antes de la recepción por parte de él. Esta incertidumbre se genera cuando las partidas de productos abandonan un sitio de despacho de cualquier parte de la cadena productiva sin un pertinente sistema de monitoreo.
Esta ausencia de información, aparte de entorpecer la identificación nítida de responsabilidades ante eventos adversos, no permite lograr un registro de las solicitaciones de la carga agrícola a lo largo del proceso de transporte, ni del deterioro de ella. Ante ello se propone la incorporación de un multi-sensor en la carga agrícola que conste al menos de un acelerógrafo para medir “sacudidas” “golpes” y similares; más otros sensores que permitan medir en tiempo real variables que influyen en la calidad del producto y que no pueden conocerse una vez que la carga ha abandonado la planta., como por ejemplo temperatura, presión y humedad.
El sistema consta de un acelerógrafo para medir la aceleración en las tres coordenadas espaciales, un barógrafo, termógrafo y un higrógrafo; todos integrados en una plataforma de hardware que posee una fuente de energía, un microcontrolador encargado de muestrear temporalmente los sensores a través de sus puertos análogos y/o digitales grabando los datos en un memoria. Los datos capturados durante los movimientos de la carga por cada uno de los sensores pueden ser cargados en un software residente en un computador personal, para correlacionarlos con el detrimento que sufren damascos, uvas y otros productos de interés, entregando información precisa y exacta, no tan sólo útil para el productor y el encargado de la logística; sino además para las empresas de Aseguramiento de Calidad y las Compañías de Seguros entre otras.
Dr. Lucio Cañete Arratia
Editor en Jefe